A estas alturas todos nos hemos dado cuenta de que la tecnología avanza sorprendentemente rápido, y de la misma forma ocurre con el diseño. Y es que no son pocas las ocasiones en las que tecnología y diseño aparecen estrechamente relacionados. Al fin y al cabo, ambas disciplinas se basan en crear, innovar y reinventar.
La tecnología nos facilita la automatización o el incremento en la eficiencia de ciertos mecanismos o acciones, las cuales tienen un gran impacto sobre el cerebro más racional o neocórtex. El diseño, sin embargo, nos llega de forma mucho más indirecta o subconsciente; una imagen puede transmitirnos un mensaje a través de acciones más visuales que impactan sobre las emociones, en el cerebro límbico o emocional.
"
Saber transmitir el valor y el propósito de una empresa, a simple golpe de vista, no es tarea fácil.
Siendo conscientes de esta evolución, grandes marcas como Adidas, Ikea, Pepsi, etc tienden a revisar su identidad visual periódicamente, aunque sea tan ligeramente que a los usuarios nos resulte en cierto modo irrelevante. Y si bien es cierto que algunos elementos corporativos como los colores o la tipografía no suelen modificarse para no perder la esencia de la marca, el propósito de un cambio de imagen busca, por lo general, cambiar la forma en la que les percibimos.
Algunos de los restylings más famosos de los últimos tiempos:
El paso del tiempo, un cambio de época, la temporalidad... Parecen razones obvias para que una empresa decida actualizar su imagen. Y, si bien resultan factores relevantes a la hora de tomar estas decisiones, hay otros factores que indican la necesidad de un restyling:
- Un cambio de valores o de filosofía de empresa. Suele darse cuando la empresa es muy antigua, y la evolución hace conveniente una revisión de la marca.
- Puede que una empresa considere que su imagen no es buena ya que al inicio de su actividad no disponía recursos suficientes o, quizá, tenía otras prioridades. Un periodo de estabilidad y reconocimiento puede resultar ideal para renovar y potenciar la imagen de una empresa o una marca.
- El producto o servicio ofrecido ha sido modificado y, en cierta medida, confunde al público objetivo. Si el cliente no reconoce la marca o esta no termina de ser efectiva, es hora de cambiar la imagen y plasmar esos cambios.
- Si la empresa se expande y se lanza al comercio exterior es más que conveniente realizar una revisión de la imagen, ya que en es posible que en otras regiones existan unas tendencias de diseño determinadas, así como toda una serie valores y percepciones diferentes a las del país de origen, las cuales pueden influenciar en la forma en que la marca es percibida. Un buen profesional deberá tener en cuenta estas características y diseñar o adaptar la imagen de tu marca para que resulte impactante en todas ellas.
- Si se desea cambiar el tipo de clientela que llega a un negocio, ya que es posible que la imagen de la misma atraiga a un tipo de clientela no "deseada". Por ejemplo, si se busca atraer a un público más joven, se debe adaptar la imagen para darle un estilo más jovial y desenfadado; y eso es algo que sólo sabrá plasmar un buen profesional.
- Si la empresa está en situación de "crisis" es posible infundirle nueva energía a través de una imagen fresca y renovada. Es la mejor manera de hacerle un "lavado de cara" y seguir adelante.
- Si hay un cambio en la dirección o una reestructuración jerárquica dentro de la empresa, es muy probable que se renueve la propuesta de valor de la misma, por lo que también puede ser un buen momento para actualizar la imagen.
Simplificar es tendencia
En diseño, la máxima de: 'menos es más' está a la orden del día. Se busca la simplificación de la imagen de marca hasta poder sintetizarla de manera que sea fácilmente reconocible a simple vista.
Podemos ver un par de ejemplos de cómo, a lo largo de los años, marcas icónicas han evolucionado hasta convertirse en lo que vemos a día de hoy:
STARBUCKS
SHELL
Esperamos haberos ayudado a ver por qué un cambio de imagen puede ser una gran decisión de negocio. Y, ya sabéis, si necesitáis un restyling, sea por el motivo que sea, no dudéis en consultarnos. Nos gusta ponernos en la piel de nuestros clientes a la hora de proporcionarles algo tan importante como una nueva imagen.
En Eclectick Studio escucharemos atentamente vuestras necesidades, estudiaremos exhaustivamente vuestros objetivos y os realizaremos una propuesta ¡Sin compromiso!